Museo Gastronómico Itinerante Transforma la Casona Santiváñez en un Santuario de Sabores y Saberes Culinarios
En una celebración única del Día Municipal de la Gastronomía Cochabambina, la histórica Casona Santiváñez se convirtió en un verdadero santuario de sabores y saberes culinarios con la realización del Museo Gastronómico Itinerante. Organizado por la Alcaldía de Cochabamba, este evento sin precedentes reunió a asociaciones gastronómicas y a la academia en una exposición que permitió a los asistentes recorrer la rica historia de la cocina local a través de sus platos más emblemáticos.
La muestra incluyó una cuidadosa selección de 22 platos típicos, presentados de forma cronológica para destacar la evolución de la gastronomía cochabambina. Desde las recetas más antiguas hasta las reinterpretaciones modernas, cada plato contó una historia de identidad cultural y tradición. Este recorrido no solo permitió apreciar la diversidad de sabores, sino también entender los contextos históricos y productivos de cada preparación.
La colaboración entre la academia y las asociaciones fue fundamental para el éxito del evento. La carrera de Turismo y Hotelería de la UCATEC, representada por sus estudiantes, ofreció explicaciones académicas sobre el origen y evolución de recetas emblemáticas como humintas, chicharrón, papalisa, helado, watia-pampaku y jakalawua, proporcionando una perspectiva profunda y educativa a los visitantes.
Asimismo, participaron diversas asociaciones como la Asociación de la Comida Criolla Tradicional y la Asociación Maya Pipis, junto con cámaras empresariales como Aserac y ACB, y plataformas de promoción cultural como Miga Bolivia y la Plataforma Unesco de Cochabamba. Esta diversidad de participantes reflejó la riqueza y pluralidad de la gastronomía cochabambina, fortaleciendo el tejido cultural y económico de la región.
El Museo Gastronómico Itinerante en la Casona Santiváñez no solo celebró la gastronomía local, sino que también destacó la importancia de preservar y promover el patrimonio culinario como parte integral de la identidad cochabambina. Este evento se erige como un hito en la promoción cultural y turística de Cochabamba, dejando una huella imborrable en todos los que tuvieron el privilegio de asistir.